“Apoyarte, Espacio entre mujeres” es un Servicio de acogida integral, de rápida accesibilidad y de atención global. Se trata de un espacio abierto y gratuito dirigido a mujeres sin recursos, con menores a cargo y en situación de gran vulnerabilidad social. Por Isabel Martínez.
Esta iniciativa, que promueve el empoderamiento de las mujeres, incentiva el cuidado mutuo y fomenta relaciones de igualdad ampliando su red de apoyo, se estructura en tres líneas de acción: Atención psicológica, Asesoría y orientación socio-laboral o formativa y Espacios de arte y cultura. Así funcionan:
• Atención psicológica con apoyo terapéutico individual, que permite resolver las dificultades psicoemocionales, promoviendo recursos saludables para afrontar su vida cotidiana de una forma más positiva y feliz. Y familiar, para dar respuesta a las situaciones de crisis puntual derivadas de las propias funciones familiares y del ciclo vital de cada individuo, promoviendo que las situaciones no se cronifiquen en el tiempo.
• Asesoría y orientación socio-laboral o formativa, para que las mujeres puedan adquirir y desarrollar sus potencialidades, mejorar la empleabilidad, así como su empoderamiento y autonomía, trabajando de manera personalizada a través de Itinerarios de Inserción Socio-laboral.
• Espacios de arte y cultura, a través de la línea “ApoyARTE. Arte y Cultura”. Acercamos la cultura, el arte y un ocio saludable a las mujeres del Servicio. El arte como una plataforma alternativa de formación/educación, como una herramienta de inclusión social y de transmisión de valores, en definitiva un instrumento de comunicación, donde se obtiene nuevas formas creativas de resolución de conflictos.
Las prácticas artísticas como el teatro, la danza, la pintura, la música, etcétera son un lenguaje universal que se constituyen en un vehículo transmisor de experiencias, donde fácilmente pueden reconocerse vivencias comunes, aspecto fundamental para las mujeres de Apoyarte. Consideramos esencial la presencia de la mujer o de la mirada feminista como eje de transmisión de estos valores, posibilitando relaciones equitativas en las que re-descubrirse y enriquecerse, estimulando por lo tanto, cambios individuales, los cuales son esenciales para un verdadero cambio social. “La cultura es el fundamento necesario para un desarrollo auténtico” (UNESCO, Conferencia Mundial sobre las Políticas Culturales Declaración de México, México D.F. 1982 p.46)
Teniendo en cuenta el arte como herramienta terapéutica, una de las actividades grupales desarrolladas durante el mes de julio en ApoyARTE y Cultura, fue un taller de Mándalas, unas clases que fueron impartido por dos participantes del Servicio, Mª Jesús Sánchez Molina y Margarita Rodríguez Alvarez, con la supervisión técnica del equipo de Apoyarte.
La palabra mándala viene del sánscrito. Significa “círculo” y se trata de una representación simbólica y arquetípica del universo según la antigua cosmología budista. Estáconstituida por un conjunto de figuras y formas geométricas concéntricas que representa las características más importantes del universo. Existen mándalas en todas las civilizaciones y culturas.
Con el objetivo de poner en práctica el arte curativo con Mándalas y trabajar sobre la imagen simbólica personal que este nos devuelve, comenzamos un taller en el mes de julio, que continuará en septiembre, formado por un grupo de 11 mujeres.
La experiencia ha sido muy positiva, cada una de las participantes se han beneficiado del valor terapéutico de los mándalas, permitiéndoles contactar con una actividad que conecta con el aquí y el ahora. Teniendo en cuenta que una de las mayores dificultades cuando se viven situaciones de ansiedad y depresión es conectar con el momento presente, el taller ha facilitado, entre otros aspectos, el descubrimiento con su propia creatividad, desarrollar su paciencia, vencer la rutina y el estrés más fácilmente, desarrollar un trabajo de meditación activa, la capacidad de trabajar en grupo, la capacidad de negociar, etc.
Al terminar el taller una de las participantes comentaba su sensación de bienestar diciendo, “he dejado de darle a la centrifugadora de ideas”, expresando de forma muy gráfica esta capacidad meditativa y tan beneficiosa de los mándalas, capacidad que por otro lado también está en ellas, aunque muchas la desconocen.
Dada la buena acogida de este trabajo, retomaremos los talleres en el mes de septiembre con un trabajo sobre los círculos cromáticos, ya que estas sesiones grupales, se han constituido en un espacio para la auto observación, para descubrir la propia creatividad, dando cabida a un descubrimiento mayor, el potencial oculto en cada una de las mujeres que han participado en el taller de mándalas.
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