No vale que el feminismo digan que está de moda cuando la desigualdad persiste. Fundación Atenea celebra todos los días del año el Día de la Mujer Trabajadora. Además del paro del 8M, estas son algunas de las actividades que continúan para conmemorar esa jornada aparte de su trabajo transversal en género.
“2016 ha sido un año duro para nosotras: misoginia expresada desde la presidencia de EEUU, intento de prohibir el aborto en Polonia, despenalización de la violencia de género en Rusia, feminicidio y violaciones en Latinoamérica, en todo el mundo y en España también. Queremos dar respuesta a esta violencia social, laboral, legal, política, moral, verbal, física y afectiva. Desde Fundación Atenea nos unimos a las actuaciones que se desarrollan en todo el mundo para denunciar y sensibilizar acerca esta situación. Por eso, para la entidad, la celebración del 8 de marzo es un trabajo de todos los días”, afirma Yolanda Manjón, responsable de Comunicación y Marketing de la Fundación Atenea.
Para empezar, y a modo simbólico, la Fundación paró durante esa jornada en todos los territorios donde opera (Extremadura, Castilla la Mancha, Andalucía y Madrid), pero además, desarrolló toda una serie de actividades puntuales. Objetivo: incidir en la desigualdad estructural entre hombres y mujeres.
Aparte, dentro de las iniciativas programadas, en la Comunidad de Madrid, este mes está previsto el próximo 17 de marzo una visita a la Fundación Thyssen, como parte del programa dirigido a mujeres Apoyarte. Y el 24, se pasará la película Sufragistas, en la sede de la Fundación Atenea.
En Andalucía, con motivo del 8 de marzo, desde el Programa Higea se propuso un taller de reflexión con mujeres para responder a la famosa cuestión planteada por Simone de Beauvoir en el Segundo sexo, ¿“qué es ser mujer?”. “La mujer como sujeto” fue el gran tema (en referencia y relación) y en los procesos que las construyen como mujeres únicas y concretas. También en diversos talleres se incidió en lo que suponen los micromachismos y hubo actividades para reivindicar la autoría de las mujeres en campos como la informática.
Mostrar el trabajo invisibilizado de las mujeres fue uno de los objetivos de las actividades de la delegación en Castilla la Mancha de la Fundación. Para ello montaron un panel-homenaje en el centro de la ciudad con una serie de mujeres que han dejado huella en la historia por su aportación en los ámbitos de la cultura, las ciencias, la lucha por la igualdad. También hubo un espacio de acercamiento con las mujeres que ejercen la prostitución.
En Extremadura, además del estreno de los cortos Mujeres 8 mm, un trabajo que recibió el reconocimiento y felicitaciones de los representantes que acudieron al acto (Imex, Ayuntamiento de Marida, Ijex y Obra Social la Caixa), la Fundación participó en el acto institucional de la Asamblea de Extremadura que organiza el IMEX y en las acciones que desde el Consejo local de Mujeres del Ayuntamiento de Mérida.